Es probable que no haya en el mundo una interrogante más grande en el mundo que ¿Quién creó al hombre? En efecto, Darwin intentó enarbolar una teoría que alejara al ser humano de esa incógnita, pero no fue suficiente, pues el eslabón que probaría el paso de simio a homo sapiens aún está perdido. Sin resolución científica, el ser humano continúa en búsqueda de su origen, queriendo saber cuál es la respuesta final; trata del santo grial del inicio del mundo como se conoce. Es por ello que la creencia en antiguos dioses extraterrestres aún sigue en boga y se está convirtiendo en una de las teorías favoritas por muchos.
Sin poder llegar a un consenso, el hombre solo ha podido cobijarse en las posibilidades de “quiénes podríamos ser” o “de dónde podríamos venir”, usando como pruebas lo pocos descubrimientos arqueológicos que se tienen y que dan pie para la creación de teorías alienígenas. En este sentido, uno de los casos que más ha hecho mella en los teóricos es el del diluvio: una catástrofe que parece haber unido, a través de una línea tangente, a todas las civilizaciones antiguas del mundo, a pesar de que no hubiese contacto entre ellas.
Es sabido que la historia de La Gran Inundación purgó a la tierra. Entiéndase el término purgar como el usado en la biblia, debido a que Dios consideró necesario hacer borrón y cuenta nueva con la humanidad, presumiendo que así se repoblaría la tierra con mejores hombres, libres de pecado. Sin embargo hay quienes se cuestionan acerca del obrar de Dios o de un solo dios, pues consideran que en los tiempos previos al diluvio, antiguos extraterrestres moraban en la tierra, instruyendo a todas las civilizaciones conocidas.
Dios cristiano vs dioses paganos
La religión cristiana se ha encargado de propagar sus creencias alrededor del mundo, con la mayor cantidad de fieles contabilizados. Eso ha hecho que las historias representadas en la biblia tengan un mayor alcance; no obstante, hay civilizaciones que aun preservan sus historias míticas y muchas de ellas van de la mano con la doctrina cristiana, aunque con diferencias notables. Este es el caso de la versión bíblica del diluvio que muestra a Noé como el héroe, aunque otras culturas discrepan de quién fue la verdadera figura que llevó la batuta durante la catástrofe.
Los hindúes afirman que el hombre que escapó del diluvio respondía al nombré de Manú, un fiel religioso que acataba los designios referidos por Visnú, el dios de los cuatro brazos y una de las máximas deidades de la religión hindú. Según el mito, Visnú le dijo a Manú que en siete días las aguas ocultarían la tierra, con lo cual el fiel hizo los preparativos salvando así su cultura. Lo curioso de este asunto es que según la religión cristiana, Dios le indicó exactamente lo mismo a Noé. ¿Es casualidad que ambos dioses profirieran lo mismo?
Usualmente los que conciben la idea del diluvio como un mero hecho ficcional, argumentan que civilizaciones antiguas como los egipcios no tienen registro de que por su historia haya pasado una calamidad de esta envergadura. Pero ciertos descubrimientos arqueológicos como El Libro de los Muertos indican que Thoth, el dios de la luna, vio que los hombres se habían hecho hostiles, fomentando la guerra entre hermanos y matando su propia estirpe. Con estas premisas, se avocó a destruir al hombre a través de una inundación. ¿Otra casualidad?
Influencia de Dioses Extraterrestres
Teóricos de los antiguos astronautas proponen que mucho del conocimiento que hoy día disfruta la humanidad provino de seres divinos, quienes vinieron a la tierra para enseñarnos los vericuetos de cómo se crea una comunidad civilizada. Estos mismos teóricos son quienes se cuestionan las posibilidades de que pueblos ancestrales pudiesen compartir este tipo de historias.
Si se dispusieran en un mapa las naciones mencionadas y se describieran los medios de transporte usados para la época, se hace casi imposible que civilizaciones tan alejadas una de la otra compartieran, en esencia, los mismos fenómenos míticos.
¿Sería entonces un solo dios quien acudió a estas civilizaciones para alertarlas de lo que iba a suceder? Un ente sobrenatural que tenía las habilidades para trasladarse de un lugar a otro en instantes, sin mediar en distancias. La incógnita toma mayor peso cuando se sigue escrudiñando en los estantes de otras culturas, y se encuentran más mitos fundacionales que emulan lo ocurrido durante La Gran Inundación.
Alrededor del diluvio se crearon muchas historias de monstruos que nacieron en las profundidades de las aguas y emergieron para atacar al hombre
Otras versiones del diluvio
Como si lo expresado fuera poco, existen otras maneras de entender cómo sucedió esta catástrofe, según la interpretación de culturas cada vez más alejadas de la religión cristiana. Tal es el caso de los griegos y la inundación enviada por Zeus, con el fin de crear una raza de hombre lo más cercano a la perfección. En esta versión quien se salva es Deucalión, quien junto a su esposa construye un arca y escapa de la muerte. La similitud trasciende cuando se afirma que el griego encalló en lo alto de una montaña, como le sucedió a Noé.
En China se dice que quien se salvó fue Un-wah. Para los escandinavos, la salvación fue obra de Bergalmer un campesino que al igual que Noé, construyó un navío con la ayuda de su esposa. Los hawaianos, una cultura muy entregada a sus mitos fundacionales, se mantiene que el héroe durante el diluvio fue Nu-u. En este sentido, se cree que existe la posibilidad de que haya habido influencia cristiana en el mito hawaiano, debido al notorio parecido entre el nombre del susodicho y Noé. No hay pruebas que confirmen o refuten esta teoría.
América también tiene en sus archivos, una versión del hecho. En México quien equivale a Noé y los antes nombrados es Coxcox. El proceso de construcción del navío se repite como en las otras culturas, con un ente divino que lo alerta tanto a él, como a su mujer, proyectando que después del desastre, ambos podrían comenzar a repoblar la tierra. Esta historia se une al relato de la construcción de la Torre de Babel, creada para prevenir otro tipo de calamidad semejante a la de la Gran Inundación.
¿Castigo de un dios o de varios?
Cada cultura ha expresado su forma de ver los hechos que han marcado la vida del hombre en la tierra. Del mismo modo, la lucha entre el monoteísmo y el politeísmo se ha tornado cada vez más hostil, donde cada doctrina defiende su postura hasta llegar al extremo de morir por ella. Tomando lo ya descrito como acciones divinas, es posible determinar que un mismo dios acudió a diferentes civilizaciones con la finalidad de alertarlos sobre su desencanto para con el hombre. Pero no queda por fuera lo confuso de la situación, demostrando así que el hombre, ya sea por efectos de un ser sobrenatural o por designios casuales, siempre ha estado intrínsecamente unido.
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